sábado, 25 de marzo de 2023

Inclusión forzada

     Con los próximos estrenos de las nuevas adaptaciones de Disney de algunos de sus clásicos ha vuelto a surgir el debate de la inclusión, de si ésta es forzada o no, en las películas y series actuales. Hay muchas opiniones y argumentos al respecto y, una vez más, quiero dejar por aquí el mío.

    No soy demasiado partidaria a que se le cambie el aspecto físico a los personajes pues, si el autor los diseñó de esa manera sus motivos tendría y a mi tampoco me gustaría que le hicieran lo mismo a los míos. Algunos se escudan en que como se trata de "seres fantásticos" no sabemos como es su aspecto real y por supuesto que no, pero sí sabes el aspecto de ese personaje específico ya que su creador así lo decidió describir. 

    No veo la necesidad de cambiar personajes ya existentes con la excusa de que todos necesitan ser representados. Por supuesto que todo el mundo merece algún personaje con el que identificarse en pantalla (o en un libro), pero ya se deben crear nuevas historias y personajes para lograr esto y no cambiar a las de épocas pasadas ya que sus valores ya están anticuadas y no nos representan actualmente como sociedad (pero esto ya es otro tema del que escribiré en un futuro). Con tanta renovación de clásicos sólo parece que las grandes compañías se han quedado sin ideas para crear y quieren seguir ganando dinero a toda costa, limitándose a rehacer sus viejas cintas, cambiando los personajes de etnia o modificando ligeramente la historia.

    Ya en su día, mediante series Spin-Off se clásicos ya consiguieron la inclusión y sin ser forzada, pues eran personajes completamente nuevos, como en el caso de la serie de Campanilla, cuyos compañeras y amigas representaban perfectamente la diversidad; o en la serie de la Sirenita.

    No es necesario cambiar lo viejo para ser inclusivos. Tampoco sería agradable que ocurriese en el caso contrario, como por ejemplo que a Mulan la interpretase una actriz americana, no tendría sentido, pues esta joven era china.

    En cuanto a las orientaciones sexuales de los personajes, tampoco importaba lo que fueran antes, lo hacía de forma discreta y ya quedaba en la mente del espectador el darse cuenta o no. Eran otros tiempos, la diversidad no estaba bien vista.

    Entiendo que se quiera representar la diversidad y que todos tengan su representación, pero cambiando lo antiguo sólo se genera polémica y que apenas haya personas que les agrade esto. Es hora de hacer nuevas películas y series y dejar las otras atrás. Todo el mundo merece sentirse identificado con un personaje, no hay necesidad de hacer cambios en las historias, pertenecían a otra época y tampoco hay que tacharla de la historia. Hemos cambiado desde entonces y hay que recordarlo.

    Creemos nuevas historias para seguir haciendo ver al mundo que no todos son iguales, somos muchos y todos merecen ser vistos. Quiero nuevas historias, no las mismas de siempre que se creen inclusivos sólo por cambiar la etnia o sexualidad de un personaje. Eso es inclusión forzada, no real.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario